Cuando Milei y varios de los ministros que viajaron nuevamente a Europa llegaron a la capital italiana, la actividad había terminado.
Unos 250 mil fieles acudieron a la Basílica de San Pedro para darle el último adiós a Francisco, el papa argentino. Entre ellos, líderes mundiales de distintas latitudes como Lula Da Silva, de Brasil, o Emmanuel Macron, de Francia. Sin embargo, hubo uno que faltó: Javier Milei, presidente argentino.
Milei viajó a Europa junto a su hermana Karina, una vez más. Fueron también Patricia Bullrich, Guillermo Francos, Manuel Adorni, Nahuel Sotelo, Sandra Pettovello y Gerardo Werthein, en concepto de comitiva argentina. Pero no asistieron a la despedida porque llegaron tarde y les cerraron las puertas de la Basílica.
Hay distintas versiones sobre los motivos de la ausencia; en cualquier caso, escandalosa. Unos apuntan a una actividad previa de la que participó Milei, que retrasó su vuelo a Roma: la entrega del Doctorado Honoris Causa al economista español Jesús Huerta de Soto, en la Escuela Superior de Economía y Administración de Empresas (ESEADE), de su socio Alberto Benegas Lynch.
Otros indican motivos aún más polémicos: no quiso ir. El viaje no cuenta con agenda oficial. El avión presidencial partió de Aeroparque e hizo una escala en la isla de Gran Canaria, España, para luego partir hacia Roma. El presidente y su nutrido grupo de ministros llegaron y, sin mayores explicaciones, se alojaron en el hotel Ambasciatori Intercontinental.
Lejos de la autocrítica y cerca de la inestabilidad emocional, el presidente argentino descargó su frustración contra el periodismo: «A la luz de muchos comentarios que veo de gran parte del periodismo, en los que hacen foco en cuestiones de 25° orden, cada día me queda más claro que obedece a un déficit de IQ muy severo ya que no tienen la capacidad para entender (son brutos) lo importante».
El mandatario pareció aludir así a las críticas que recibió en redes sociales por haber llegado tarde al funeral más importante del mundo, luego de atravesar el Atlántico junto a una buena porción del gabinete, con fondos del erario público.
De no mediar nuevos contratiempos, Javier Milei, su hermana y los citados ministros estarán presentes en el funeral del sábado.