Para Cristian Larsen el fuego puede esperar, las comidas en hoteles de lujo no
Cristian Larsen comió de lujo en su viaje relámpago en Bariloche. Eso sí, mientras se deleitaba con las delicias del restaurante del Cacique Inacayal Lake & Spa Hotel, el director de Parques Nacionales decía estar monitoreando los incendios en los alrededores del lago que ya consumieron más de dos mil hectáreas de bosque nativo. Por ese almuerzo -que él lo llamó «de trabajo»- el Estado nacional abonó 331 mil pesos.
Se ve que el director nacional -un delfín de Hernán Lombardi- anduvo con bastante hambre, porque luego de aterrizar con el avión hidrante que buscaba contener las llamas en el Nahuel Huapi el 28 de diciembre, Larsen y su séquito pasaron primero por el bar del Aeropuerto. Allí, entre los sandwiches de Bondiola de Kandahar y un «paisano» de la cadena Tosado, el director nacional apoyó la tarjeta corporativa para gastar 141.900 pesos, según figura en las facturas que presentó para la rendición de viáticos.
El plato fuerte llegó el 29 de diciembre. Casi en sintonía para darle retuit a un posteo que lo muestra «comandando» las tareas para combatir el incendio, Larsen llegó hasta el lujoso Cacique Inacayal, frente al imponente lago. Allí parece que no se detuvo a ver los precios, porque el total del almuerzo fue de 392 mil pesos.
Luego del postre y el café ni siquiera estuvo de nuevo por la zona: a las 15 horas embarcó para tomarse el avión de Aerolíneas Argentinas que lo situó de nuevo en Buenos Aires.
Fuente: Página 12