En medio del agravamiento de las condiciones socioeconómicas locales, el Pontífice aceptó darle una audiencia a la «mesa chica» de la central obrera, sumergida en un debate interno que apunta a subir el nivel de conflictividad con el Gobierno.

El papa Francisco recibirá a la jefatura de la CGT el 16 de septiembre en una audiencia privada. Será el primer encuentro protocolar de la conducción de la central sindical a pesar de que en otras oportunidades el Pontífice les concedió reuniones a dirigentes gremiales de manera individual o en grupo. El encuentro se concretará en la residencia vaticana de Santa Marta en el contexto de aumento progresivo de la tensión social por el empeoramiento de las condiciones económicas.

La audiencia tiene como participantes confirmados a Héctor Daer, co-secretario general de la central sindical, junto a Gerardo Martínez (albañiles, Uocra), Andrés Rodríguez (estatales, UPCN) y Jorge Sola (personal del seguro) aunque se daba por hecho que también incluirá a Pablo Moyano, otro miembro del triunvirato de conducción. Si bien los contactos de Jorge Bergoglio con referentes de la política argentina se tramitan con meses de antelación, los momentos en que se concretan suelen coincidir con el interés del Papa en enviar mensajes a su país natal. En esa clave se leyó la recepción a principios de mes a la hija de una de las fundadoras de Madres de Plaza de Mayo en medio de las revelaciones por la visita de diputados libertarios a genocidas encarcelados.

Fuente: El Destape